Este articulo lo escribí a mediados de abril, y surgió de una conversación con dos amigos, con los cuales nos pusimos a ver “el rey del ganado” en la tarde en el canal del angelito, mis amigos, carreteros de los viejos, estaban desayunando como a las 3 de la tarde, y nos pusimos a recordar a nuestra querida Nana, la tele, coincidimos en hartas cosas en materia televisiva, una de las cosas que estuvimos recordando fue de las teleseries, esas protagonistas de guerras sin derramamiento de sangre pero si con rodar de cabezas (productores, guionistas, etc) en caso de fracaso.
Cuantas horas frente a dramas mexicanos cebolleros, de risa fácil estilo TVN, complejos a lo canal 13, modernos como los culebrones brasileños y rápidos como los argentinos.
En esto de las telenovelas existe mucha variación de acuerdo al lugar de donde provenga, quizás motivado por el publico al cual apunta, la realidad sociológica y educacional del lugar de realización, pensando de este modo podemos suponer que una teleserie boom en nuestro país, no causaría ningún efecto mediático en Bolivia, por poner un ejemplo. O las sobre reacción ante una producción argentina cargada de erotismo pasaría sin mayor fanfarria por el publico brasileño.
Sin embargo pienso que las teleseries tienen un efecto casi opiáceo en la población, generan un sueño de realidades, una fuga del estar cotidiano, permite a la señora del quiosco ser por una hora y cuarto ser una esclava que lucha contra la opresión, al tata de la esquina ser un galán cuatrero y al chofer de la micro ser un pascuense luchando por su Vaitea amada.
Las telenovelas, querámoslo o no, son un sutil reflejo de cada una de las sociedades de las cuales surgen, y a logrado mejor que ningún otro medio (libros, diarios, revistas), influir en el inconsciente de nuestra sociedad.
Sin embargo, he notado y espero no ser el único que se ha dado cuenta, como las teleseries han ido mutando de la esencia primitiva nacional, donde quedo el “angel malo” que hay dentro de nosotros? la picardía de “sucupira”? que paso? Ahora cada vez mas vemos teleseries de características de producción globalizada, pensadas más en ganar en el rating que en crear una novela de calidad, quizás reflejando de cierta manera nuestra sociedad, que día a día pierde un poquito de su identidad a merced de la globalización,
Teleseries que quizás volvería a ver (tómese como ranking):
1. Iorana.
2. Sucupira.
3. Machos.
4. Muñeca brava.
5. Amor a domicilio.